23.2.05

Cita

Hay algunos secretos que no deberían ser contados. Los hombres mueren por la noche en sus camas aferrando las manos de confesores fantasmales y mirando piadosamente sus ojos. Se marchan con desesperación en el corazón y convulsiones en la garganta al recordar el horror de misterios que nunca deben ser revelados.

"El Hombre entre la Multitud"
Edgar Allan Poe